¿Qué me sucedió a mí? Continué recibiendo por fe cuando las personas oraban por mí, pero Dios me alcanzó un día, ¡ y recibí un toque...
Hemos aprendido a sumergir a las personas en oración, a persistir en oración por ellas, diciendo: «Dale más, Señor. Dale más».La intimidad lleva tiempo, con Dios...
Comentarios recientes